Comenzamos un Blog sobre el órgano

¡Estrenamos Blog! Esta es una ilusión que se viene gestando desde hace años y que por fin se hace realidad.


A partir del 1 de junio de 2018 me lanzo a escribir un Blog acerca del órgano. Es algo que gesté hace más de 10 años y lancé con el nombre, que ahora retomo, de Ars Organica.

- ¿Qué vamos a encontrar en este blog? - Pues de todo un poco. Aquí quiero plasmar los conocimientos de años de trabajo en el mundo del órgano y de muchísima afición. Encontraremos tanto historias de órganos, de organeros, de compositores, de obras... como artículos sobre intérpretes, cuestiones técnicas, anécdotas... y quizás hasta reflexiones personales. Dependerá de por dónde me lleve el viento del órgano...

La vocación principal de este espacio es difusiva y formativa. Pretendo dar a conocer en nuestra lengua todo lo que esté en mi mano acerca del órgano de tubos. Intentaré clasificar los artículos según las temáticas o etiquetas que encontraremos en la barra lateral (o abajo de la lista de posts si me lees desde un dispositivo móvil).

Internet nos brinda hoy día una oportunidad grandiosa de acercarnos como nunca de modo audiovisual a los instrumentos de los rincones más alejados del planeta, algo que ya me hubiera gustado que existiera cuando era estudiante... Por eso mostraré todas las imágenes y vídeos que pueda (y que las políticas de privacidad, protección de datos y bla, bla, bla... me permitan), para ilustrar del modo más claro posible todo lo que escriba.

No puedo terminar sin dar las gracias a tanta gente que ha hecho posible este espacio. A mi buen amigo y maestro Raúl, que me ha ido guiando los años de estudiante... ¡y después!; a Montserrat, que me enseñó tanto y me dio tan buenos consejos en momentos de zozobra; a Marisol, que fue quien me introdujo en el mundo del órgano; a Luis, que me llevó por primera vez ante un órgano, allá en San Miguel; a tantos organistas que me han ido transmitiendo su entusiasmo por el órgano: Santi, José Luis, Alberto, Simone, Juan... La lista es muy larga.

Y finalmente a las personas e instituciones que me han dado su permiso para utilizar material de sus distintas webs, muchas gracias de todo corazón:

Espero que seáis muchos los que aprendáis y disfrutéis (¡y me corrijáis cuando meta la pata!) de nuestro querido instrumento rey: el órgano de tubos.